El Showcooking
Fiel a su fama de innovadora desde el respeto a la tradición, durante su showcooking Rebeca Hernández reinventará la croqueta en cinco sorprendentes versiones: dos de inspiración asiática, una ecológica y otras dos de raíz española.
- Así, de su pasión por la comida callejera oriental deviene una croqueta en crujiente rollito de primavera o neem de txangurro con toques cítricos.
Su nigiri-croqueta aprovecha la grasa del jamón ibérico para aromatizar la clásica mojama de atún, toda una fusión de mar y montaña con envoltorio japonés. “Podemos hacer una croqueta eco sin perder un ápice de sabor y textura, con producto de kilómetro cero y sostenible”, asegura. - Su propuesta vegana emplea nata de lenteja, con tres maneras de boletus: en bechamel, en tropezón y en polvo deshidratado. “El veganismo ha venido para quedarse”, explica.
- Para elaborar su calamar-croqueta tintada, primero limpia el calamar y lo corta en anillas. “Después lo relleno y lo frío como una croqueta normal”, continua. El resultado, una enorme brocheta o cohete, de siete u ocho bocados por lo menos, “que da gustito comerla”.
- Por último, Rebeca Hernández recupera la esencia de una receta “que se ha ido transformando con el tiempo en un mejillón relleno rebozado”. Su reinterpretación del popular ‘tigre’ lo separa por fases en sofrito, bechamel, jugo de mejillón y rebozado fino de panfrito.
Rebeca Hernández, la madrina del Día Mundial de la Tapa
Los grandes chefs cautivan antes de empezar a cocinar. En las distancias cortas su amor hacia la profesión trasciende cualquier etiqueta. El Día Mundial de la Tapa abre simbólicamente una nueva puerta en su trayectoria, tras cerrar un ciclo de 12 años como co-propietaria de la gastro-taberna madrileña La Berenjena. Le han llovido las propuestas, pero prefiere tomárselo con calma antes de decidir su próximo proyecto. El sector se muere de curiosidad por saberlo.
«Abrí La Berenjena para seguir cocinando fuera de casa para mis amigos», recuerda Rebeca Hernández, que mamó la base de la profesión en su familia. Entre sus referentes, el maestro de maestros de la vanguardia Ferrán Adriá, además de Diego Guerrero, Martín Berasategui, Santi Santamaría y Jordi Cruz. Sin olvidar los 500 libros de su biblioteca gastronómica y los muchos rincones de comida callejera del mundo que ha recorrido. «Hay que cuidar la alta cocina porque es desarrollo cultural», subraya.
Rebeca Hernández amplificó el éxito de su taberna ya como restaurante en La Berenjena de Chamberí, que abrió en 2016. En 2019 recibió el ilustre Sol de la Guía Repsol, que ha renovado cada año hasta su traspaso en 2022.
Estudiante de audiovisuales y Filología Hispánica, lejos queda su exitoso paso por la segunda edición de Top Chef, que la dio a conocer al gran público.
Del 24 al 25 de junio repite por tercer año como chef ejecutiva del festival Paraíso de música electrónica en la Complutense. Después, quién sabe… Quizás, un pequeño restaurante de autor donde volver a innovar desde el respeto a la tradición.